Me sorprendió que no me abriera Marita. Una señora enjuta con el pelo blanco, se asomó a la puerta mirándome con sorpresa. - ¿Marita no está? - No, ha salido a comprar -me respondió la señora con una sonrisa; me causó una impresión agradable. - Yo soy su suegra, bueno, su madre política -añadió prestando … Sigue leyendo Pequeñas cosas con efectos positivos
