No hace tanto tiempo la gente vivía en los pueblos y en las masías. La incipiente industria era más artesanal que técnica absorbiendo poca mano de obra. La proliferación de fábricas fue cada día demandando más personal que abandonaba el medio ambiente para cerrarse en talleres infectos con la ilusionada promesa de cobrar cada semana. … Sigue leyendo ¡Abran las puertas!
