Una gota nubecilla
grito sedienta una flor
.-No puedo que voy de prisa
dijo la nube y pasó
Por el calor abrasada
murió la flor infeliz
Al mendigo que te ruega
no le conteste así.
La flor enamorada
Yo vi volar una flor
por los caminos del cielo
la vi subir y subir
a donde empiezan los sueño.
No fue la Gardenia blanca
ni fue la flor del Romero
fue una Rosa enamorada
de un rutilante Lucero.
Quiso acariciar su encanto
quiso embriagarse de sueños,
corrió en el espacio tanto
que se perdió en el recuerdo.
Más la Estela que dejó
quedo parada en el Cielo
con luz blanca Redentora
de Esperanza y de Sueños.
Salomé Moltó

Como siempre es un privilegio pasear entre tus versos, poetisa
Van abrazotes, amigaza
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