Ese debe de ser mi estado anímico y el de muchas más personas, después de mirar atentamente la tele y oír las noticias conque nos bombardean, una y otra vez y da lo mismo que cambies de canal, todos repiten lo mismo, así que no llego a aclararme, sólo en que ya está aquí el enemigo invisible, el coronavirus. ¿Es un virus con corona o una corona con virus? ¡Qué doloroso absurdo!
Siempre he pensado que la sociedad se ha dividido (digámoslo de forma simple) en Derecha e Izquierda. Estas dos posturas, tienen sus subgrupos y frecuentes divisiones con posturas enfrentadas que unas amables palabras y sonrisas no pueden ocultar. No llegamos a entender que un partido político que ostenta una determinada política se divida de tal forma, ¿sabrán los electores a quién votar? Y tampoco ayuda esa máxima que dice que todo tiempo pasado fue mejor y que tal o cual político lo hizo estupendamente durante su mandato, porque los “trapos sucios” como dicen, suelen salir con demasiada frecuencia que sin duda nos causa confusión por no decir estupor y espanto y claro, decepción. Pues si nosotros somos los que creamos la riqueza y ellos los que la administran, pues que lo hagan bien o que nos dejen hacerlo a nosotros que de eso también sabemos.
A los que nacimos en el franquismo, y crecimos en el “blando franquismo” la derecha nos tiene ya poco que enseñar. Ya se ve que todo cambia y lo que en un momento dado te parece extremo, se va suavizando y cambia de postura o casi.
Le esta pasando al PSOE que no me aclaro en quien es quien; que ya todos apoyan a Pedro, pues Susana, ya “desaparecida” luego está Pachi, que ya se ha unido al jefe, la impresión de una unidad que puede darles buenos resultado, aunque con la situación que estamos viviendo, el jefe del estado no debe de estar pasándolo nada bien.
Peor lo tengo con “Podemos”, se dicen de izquierda ¿cuál? Si estoy bien informada en la izquierda siempre han existido tres tendencias, la socialista, la comunista y la anarquista, aunque esta última nunca ha participado en política parlamentaria, sí en los problemas sociales Recuerdo no hace tanto que llegaron del exilio con el eurocomunismo, viejos políticos y ocuparon escaños y después también vimos una gran división entre ellos. ¿Qué le pasa a la izquierda? Me pregunto, ¿es esta división la que la hace tan vulnerable o por el contrario la enriquece? Y ahora tenemos a “Podemos” que también parece que le está pasando los mismo y su pacto con el PSOE, quizás ha resultado una buena estrategia. La joven cara de Erejón me conmovió, pero ya no lo veo, parece un niño al que el maestro a castigado cara a la pared por no haber hecho bien los deberes, en cambio parece un muchacho muy bien preparado y formal. Claro que en practica política todavía no, la piel no la tiene suficientemente curtida en este viejo oficios, que es: “arreglar la sociedad para que yo esté bien”, más o menos.
De todo esto los medios de comunicación nos informan ampliamente, pero lo que no sabemos, ni de unos ni de otros es, cómo piensan gobernar si obtienen la mayoría. Qué medidas económicas, sociales y organizativas, se pueden adoptar, para que el paro no avance de forma tan desmesurada.
Si en el siglo XIX, los trabajadores fueron capaces de organizar una sociedad más justa y me refiero a Francia, ya que nosotros dormíamos el sueño de la realeza, y sólo dimos el ejemplo durante la guerra civil, me pregunto, qué se estará cociendo con una extrema derecha que crece en Europa, de forma alarmante, mientras los trabajadores brillan por su ausencia y los sindicatos no sabemos donde han ido a parar. Y, para colmo el señor Trump nos avisa de que va a emplear miles de millones en armamento. ¿Y dónde lo quiere emplear, ahora que su enemigo de siempre ya no existe? Al minúsculo enemigo, no se le combate con armas, sí con otros medios y con inteligencia.
Salomé Moltó