Proyectando futuros

Desde la sala de espera Dª Clara observaba a la niña y un montón de pensamientos, ideas más o menos absurdas anidaban en su cerebro, en su estado anímico, en todos sus sentires. Observando la triste cara de la niña no pudo por menos que acercarse a ella un poco dubitativa, por no saber qué decirle, sino, como hacerlo, dadas las circunstancias. Pero era el momento decisivo para poner las cosas en su sitio, tal y como iba pensando.

.-Veras Eva, sé del momento difícil que estás pasando, a mi me pasa lo mismo. Tu mama está muerta, mi marido, su amante lo mismo, y tu papa irá a prisión por mucho tiempo por haberlos asesinado. Y tu irás al hospicio a pesar de que ya tienes doce años. Según parece tus abuelos están en malas condiciones y no pueden hacerse cargo de ti.

La niña estaba, como ausente, totalmente destruida por los acontecimientos. Dª Clara recordaba que la noche anterior, cuando se estaba duchando, su hijo ya lo había hecho e iba a cenar.

.-Andrés, te he preparado unas buenas berenjenas como a ti te gustan, puedes cenar, y te acuestas, yo cenaré luego, pues tengo que ducharme. Debes de estar cansado todo un día con el caballo, es algo agotador, pero seguro que la semana próxima te será más fácil el recorrido. Y no castigues tanto al caballo, ¡anda cena, yo voy luego!

Los golpes del puño del muchacho en la ducha le causó sorpresa-

-. Anda mama sal, unos señores quieren hablar contigo-

.-Conmigo? ¿A estas horas?.

Los agentes de la policía, le estuvieron hablando, dándole unas explicaciones y no entendía nada, no sabía qué le decían. Le pidieron que los acompañara para una verificación.

.-Sí, necesitamos que venga a comprobar unos hechos, no, el niño no puede venir, usted sola.

.-Este hombre ha matado a los dos amantes, aquí,en la cama, él es su marido y….ella la señora que compartía la cama ….

¡Qué absurdo! Dos amantes sorprendidos por el esposo de ella y los mata a los dos.

Así, pensaba Clara, quedan mi hijo huérfano de padre, pero la muchacha pierde a su madre y su padre se va a la cárcel.

Meses después, le dice a su hijo:

.- Andrés, he invitado a Eva, la niña que perdió a su madre y su padre está en la cárcel a que pase unos días con nosotros y si te parece bien …

.-¡Ah, es Eva, hacíamos equitación juntos! Es un encanto de chica, a lo mejor se puede quedar el verano con nosotros ¿No te parece?

.-Pues nada que objetar, me parece estupendo, vaya, a veces de los inconvenientes y los problemas salen buenos proyectos.

Salomé Moltó