Conceptos varios del trabajo


             Mágico concepto para unos, censurable para otros y, condenable para los más.

            Pretender defender el concepto trabajo pueble llevarte a una condena total. En cambio, este concepto es el más importante y el fundamental en nuestra evolución y lo sigue siendo para nuestra existencia presente.

            Mucha gente lo asocia con esclavitud, explotación, alienación y con toda una multitud de atributos negativos. No le falta razón; por desgracia en todo esto se ha convertido el trabajo.

            “Charlot”, en su magnífica obra “Tiempos modernos” denunció adecuadamente hasta donde podría llevarnos la locura del trabajo víctima de la desenfrenada producción. Trabajo era igual a aceleración sin medida..

            No obstante, lo qué somos y cómo somos se lo debemos al trabajo y a la reflexión, por supuesto. Cuando nuestros ancestros utilizaban sus herramientas, no hacían más que ejercer su mente a través del esfuerzo de un trabajo. Hacer y deshacer, practicar mil formas para mejorar un objeto cualquiera es trabajo, trabajo digno y creativo que desarrolla tanto nuestras habilidades físicas como las mentales. A través del trabajo el hombre ha evolucionado, tanto en el error como en el acierto.

            Pero llegaron los pillos y lo despojaron de toda creatividad y de todo arte, y secuestrándolo le aplicaron el sacrosanto rendimiento o “destajo” y nos metieron en el túnel oscuro de la esclavitud. Nos han prostituido el trabajo, lo han denigrado. Por ello nos gustaría reivindicarlo en su aspecto noble y artístico, en su dimensión creativa, aunque se piense que es menos rentable.

            No habrá trabajo más productivo que el realizado con entusiasmo. Una parcela de felicidad importante para el ser humano es la del trabajo bien hecho, donde la habilidad está al servicio de una creatividad satisfecha. Nada puede enriquecer tanto la sociedad ni al hombre

Pero nada de eso es notorio hoy, más bien lo contrario, la juventud, cada día mejor preparada, opta a mejores puestos laborales no por creatividad, sino por remuneración.

Tampoco entusiasman las soflamas políticas o sindicales que nos aseguran trabajo a tiempo completo para todo el mundo, sin mover lo instituido para nada. El absurdo es demencial, la tecnología ha hecho descarrilar el tren de toda planificación sindical y la distribución del trabajo de principios de siglo. Las famosas tres gracias, (8 horas de trabajo; 8 de descanso; 8 de formación), se han quedado en unas nobles viejecitas a las que hay que jubilar e ir a otra planificación de la división del trabajo, para que la plusvalía generada por la técnica vaya liberando al ser humano del trabajo esclavo y pueda tener más tiempo para el trabajo creativo y para su propia realización como ser que piensa y trabaja

 Salomé Moltó.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.